Un Reportaje en Revista Local :::::

Sin Comentarios !

El que nunca ha tratado con góticos puede pensar cualquier cosa
de ellos, menos que se trate de personas respetuosas y amables.
El festival fetiche organizado casi en secreto por el Klub Terminal es
el ejemplo: rodeado por mujeres en plataformas, maquilladas como
muertas, con ataúdes en sus espaldas y casi todas vestidas con algo
de látex, llego al Diván de Alicia. Me acompaña mi morra. La música
industrial de Noise of Terror donde el bato que canta no se le entiende
un ápice, da la bienvenida. La boletera, una mujer que produce
terror, nos sella el antebrazo “por si llegan a salir”. Diversi-dark
A oscuras, pedimos una cerveza. Frente a mí, un bato delgado, de
cabello largo, rapado de las sienes y vestido de negro. “Me llamo Ángel
pero me dicen Minos”. Noise of Terror está disfrazado con máscaras
y mandiles de carniceros ensangrentados y la música es cada vez
más intensa.
Los góticos, que llegaron a Tijuana cerca de los años 90, iniciaron su
popularidad unos 10 años antes, en Inglaterra, donde nacieron como
una contraparte a los punks. Y aunque se han mantenido como una
escena muy activa, pocas veces son ocasión de noticia en la ciudad.
Ahora, además a sus inusuales vestimentas, se les ha sumado la
cura de tener fascinación por el
salvajismo. “Aquí en Tijuana somos pocos los darks que andamos en toquines
y festivales, pero nos conocemos
casi todos. Aunque sea de vista, somos una subcultura unida y de
mucha tolerancia”, me dice Minos, Salón Viernes es un espacio donde vamos a crear, jugar e
inventar, haremos ejercicios de creatividad, jugaremos con
las bases y principios del diseño y podras desarrollar tu
trabajo personal de ilustración con asesoria personalizada
un dark de 29 años que trabaja en una óptica.
En la pista dos morras se besan, se nalguean y a nadie parece molestarle;
un hombre robusto, de cabello largo, negro, entra al baño
de hombres y sale vestido de mujer
en látex.
Tijuana cerrada
Para Ángel Ruiz, un reportero que edita desde 2005 el blog Dark
Tijuana, la escena gótica en la ciudad es “dispersa y casi inexistente
si lo quieres ver como algo consolidado”. Aunque desde los
90 han existido bares afines a los darks en la ciudad, sólo dos clubes
han destacado por organizar eventos constantemente: Club Respekt
y Klub Terminal, aunque entre ellos exista cierta rivalidad, según
algunos góticos.
Pero la rivalidad entre los darks ajenos a algún club, parece no
existir. Sólo con registrarse en el foro “Life and Goth”, administrado
por darks de Tijuana, uno puede darse cuenta. “Nuestro objetivo es
crear un espacio donde personas dentro la ideología gótica compartan
gustos e intereses, creando a su vez amistades o simples conocidos,
manejándonos siempre bajo un umbral de respeto y tolerancia”,
dice el objetivo del foro.
El DJ toca y los darks bailan. Uno usa máscara y mohawk de látex
con un pantalón rojo y camisa del mismo material, otros con el
cabello al rape, otros trenzas de color moradas y azules. A ninguno
le molesta ser fotografiado. De camino a mi mesa, me encuentro
a mi morra, que viste un suéter verde limón y un pantalón claro,
bailando muy contenta música industrial con el Minos.
Pero en la calle, las cosas son distintas: Corpse, un promotor de
eventos me dice que en Tijuana “la gente está muy cerrada al
aceptar otras culturas” y hasta para pedir trabajo te imponen
ciertas normas. ¿Cómo los ven? “Raro, yo creo que eso todos te lo
podríamos responder
***reportaje y fotografia extraidos de la Revista Diez 4